La aplicación de la Ley de Costas genera una inseguridad jurídica a las propiedades cercanas al mar que les impide desarrollar sus iniciativas e inversiones para evolucionar. Esta situación ya ha sido denunciada en el Parlamento Europeo por un informe de la danesa Margaret Auken y nosotros pretendemos unirnos a ella para dar a conocer la situación que llevamos padeciendo desde hace varios años