viernes, 16 de noviembre de 2012

Los vecinos de Cho Vito acamparán en el ayuntamiento de Candelaria

 Se sienten ajusticiados por la Administración y vejados y maltratados por quienes debían velar por sus vidas


Tomás González y Antonio Alonso ofrecieron rueda de prensa tras el violento desalojo de todos los vecinos en la que aseguraron que hoy es un nuevo hito en la historia negra del pueblo canario porque se ha demostrado que políticos y fuerzas del orden no están del lado del pueblo sino de los poderosos. Anunciaron que a partir de ahora vivirán en la casa del pueblo: el ayuntamiento de Candelaria.
González aseguró que los vecinos de Cho Vito nunca podrán olvidar lo sucedido este 16 de noviembre de 2012 como nunca podrán olvidar cuando en octubre del 2008 actuaron contra ellos por primera vez y dejó claro que si en aquel momento se levantaron y se defendieron, hoy no va a ser menos.

Dijo que hoy se ha presenciado la brutalidad en el celo de los agentes de la guardia civil que han ido a Cho Vito a maltratar de los vecinos, puesto que hablamos de que en el desalojo se ha visto cómo han sacado de sus casas a muchos vecinos arrastrándolos, cómo han golpeado a muchos ancianos a quienes han dejado la marca de sus golpes y cómo en la intimidad de las viviendas, sin presencia de las cámaras de los medios, han goleado fuertemente a varios niños que han tenido que ser llevados a centros sanitarios.

El derribo hoy de Cho Vito es una decisión política difícil de justificar, porque no tiene nada que ver con la ejecución de la sentencia, sino con el objetivo de eliminar el poblado para dar rienda suelta a la especulación de los terrenos, ya que argumenta esta forma de pensar en que en ningún momento han mostrado una orden judicial que justifique la demolición a pesar de que ha sido requerida por los vecinos en todo momento.

Para el vecino de Cho Vito, detrás del derribo del poblado está el dinero y los intereses especulativos con este terreno, ya que ese millón de euros proveniente de Europa era para rehabilitar la costa y no para echar a los vecinos de allí, dicho lo cual recuerda que mientras los vecinos que hoy han quedado en la calle no están en la Fiscalía por cometer presuntamente ningún delito, José Gumersindo García Trujillo, alcalde de Candelaria, sí lo está por levantar una vivienda en suelo rústico.
Tomás González espera que a partir de ahora no salga a la palestra ningún político, de ningún partido, en el gobierno o en la oposición, a decir en los medios que han hecho todo lo imposible para evitar la destrucción de Cho Vito porque eso es mentira y añadió que es indigno que nueve familias se queden hoy en el mayor de los desamparos, justo el día después de que el Gobierno estatal aprobara un decreto para evitar desahucios durante dos años y cuando está en fase de trámite en el Congreso la nueva Ley de Costas.

Para los vecinos, el alcalde de Candelaria es el principal culpable de todo, porque se ha puesto del lado de intereses empresariales y ha abandonado a sus vecinos, pero también es culpable la delegada del Gobierno de España en las islas, María del Carmen Hernández Bento, cuya palabra de que no quedarían en la calle era mentira como se ha comprobado hoy: “su palabra tiene menos valor que hoy en día la bolsa española”, dijo.

Afirmó en esta rueda de prensa improvisada mientras las palas derrumban las casas que es mentira que José Gumersindo García haya negociado una salida a este problema como ha dicho en la prensa, ya que solamente que querido dar esa imagen por una cuestión partidista: si hubiera querido hacer algo, había estado con los vecinos. Se ha limitado a correos electrónicos.
Recordó que los vecinos sólo pedían que se aplazara la orden de derribo mientras se acordara una solución y que a cambio de sus casas, les dieran otras, por lo que no podían aceptar 12.000 euros para algunos de los afectados, tras lo que explicó que los vecinos en huelga de hambre desde hace días aún no saben qué van a hacer al respecto, una decisión que tomarán en asamblea, como igualmente ocurrirá con la decisión de dónde van a acampar.

Cuestionado por el hecho de que el alcalde había dicho en la prensa que los vecinos serían alojados en un hotel, Tomás González dijo que esa es otra de las artimañas de José Gumersindo porque en ningún momento informó a los vecinos de tal posibilidad: “Apúntate otra medalla Sindo”, dijo para mostrar sus dudas de que sea verdad.

Para finalizar, dejó claro que la lucha vecinal no ha terminado aquí porque hay muchas ilegalidades en este derribo que serán denunciadas donde proceda, recordando que hay un proceso abierto por todo lo que ha ocurrido hasta la fecha, concluyendo que el alcalde no puede llamar a nadie ilegal porque él es el primero que tiene una vivienda ilegal como así ha publicado la prensa tinerfeña. 
http://www.sanborondon.info/content/view/48936/1/