Mientras el ministerio está distraido CONFISCANDO Y DERRIBANDO pueblos con siglos de antigüedad...
Mientras Costas se gasta ingentes cantidades de euros haciendo deslindes e informes para demostrar que un molino del siglo XVII ha trasgredido una ley del siglo XX...
Mientras los abogados del Estado dedican sus horas (pagadas con nuestros impuestos) en defender lo indefendible...
Mientras los jueces dictan sentencias contradictorias dependiendo de quién tengan enfrente...
Mientras los políticos se dedican a decir lo contrario a lo que luego hacen en el Congreso...
Mientras los “vigilantes de la playa” nos ponen multas millonarias por reformar tu propia casa o negocio, por cambiar un toldo, un cristal...
Mientras los ecologistas callan...
Barcelona gana metro a metro, hectárea tras hectárea al mar en beneficio de negocios privados. Y ¿qué quieren que les diga? que me parece bien todo lo que se haga para generar riqueza en estos momentos de gravísima recesión, pero que se derogue la Ley de Costas y todos los pueblos y ciudades puedan hacer lo mismo. Mientras siga existiendo la norma, todos debemos ser tratados con la misma vara de medir.
Lo que está ocurriendo en estos momentos, lo anunció la ministra Isabel Tocino cuando les denegó en 1999, mediante informes vinculantes, ganar terrenos al mar porque sabía que existían proyectos especulativos detrás.
Todos se justifican con la pésima y manida excusa de que no se rigen por la Ley de Costas, sino por la de Puertos, cosa que no es cierta porque los puertos que no son estatales, son concesiones que se rigen por la Ley de Costas. Aún así, la Ley de Puertos tampoco permite edificaciones que puedan tener otra ubicación si no son impescindibles para usos portuarios.
¿Dónde está el ministerio, Costas, los abogados del Estado, los jueces, los politicos, los vigilantes, los ecologístas, cuando se trata de Barcelona?
Barcelona tendrá un nuevo puerto deportivo de lujo junto al hotel Vela
El Ayuntamiento aprueba el plan desarrollado por la Autoridad Portuaria - El Moll dels Pescadors será reformado totalmente y tendrá una zona de ocio
Para un gran hotel, un muelle de lujo. La comisión de gobierno del Ayuntamiento de Barcelona aprobó ayer una nueva transformación de la zona del Port Vell que pemitirá, entre otras cosas, la construcción de una marina deportiva, con capacidad para 400 embarcaciones, cerca al hotel W. El plan, propuesto por la Autoridad Portuaria, también incluye la construcción de zonas de ocio allí y en el Moll dels Pescadors, donde está la torre del reloj. El Puerto realizará todas las obras.
El muelle contará con 150 amarres para barcos de mediana y gran eslora, según una portavoz del Puerto. El recinto estará enmarcado por un gran paseo marítimo, que se conectará con el paseo de Joan de Borbó. Las otras 250 embarcaciones, más pequeñas, se guardarán en una marina seca, que será subterránea y sobre la cual se hará una plaza con restaurantes. Según la concejal Assumpta Escarp, que presentó ayer el acuerdo, "no serán lugares de ocio nocturno".
El complejo de la nueva bocana lo completa la futura sede de la clínica Barceloneta y tres edificios del arquitecto Ricardo Bofill que albergarán la sede de investigación de la marca Desigual y un centro de la Fundación Pasqual Maragall contra el alzheimer. Según el Puerto, también se ha cedido un local y una nave a la Fundación para la Navegación Oceánica, que organiza la Barcelona World Race.
El proyecto ha sido criticado por Ricard Gomà (ICV-EUiA), que aseguró que se trata de un paso más en "la privatización del litoral".
La Autoridad Portuaria había aprobado el plan en junio del año pasado, pero necesitaba el visto bueno del Ayuntamiento para poder ejecutarlo. La modificación cobija unos 155.877 metros cuadrados y prevé un total de 99.414 de techo. Assumpta Escarp explicó que se reducirá la edificabilidad de la zona en un 25% aunque, no se demolerán los edificios actuales, que mantienen la imagen marinera.
Según la portavoz del Puerto, aún no hay fecha para el concurso público que adjudicará la construcción de la marina, primer paso de la transformación. Aunque se desconoce el coste de toda la obra, con seguridad será uno de los negocios del año en la ciudad.
Lo que sí tiene precio es la reforma del Moll dels Pescadors, donde se encuentra la centenaria torre del Rellotge. Allí el Puerto se gastará 10,5 millones de euros en el derrumbe de la lonja de pescadores y la fábrica de hielo, la construcción de sus nuevas instalaciones y la adecuación urbanística de todo el muelle. Una gran pasarela elevada para peatones conectará ambos edificios con la torre, que es una construcción catalogada de interés, y permitirá a los peatones observar las actividades de los pescadores. Allí también habrá restaurantes, generando así una nueva zona de ocio en la ciudad.
El Ayuntamiento espera que esta obra se finalice antes de cuatro años. Se realizará por etapas para poder conciliar el trabajo diario de los pescadores con la construcción. Este proyecto tampoco tiene fecha de concurso.