No es expropiación es CONFISCACIÓN
Esta mañana los residentes del pueblo costero de Torre la Sal se han vuelto a reunir, frente a la Casa dels Caragols, para solicitar el archivo del expediente de recuperación iniciado por Costas. Un procedimiento, que pretende convertir la zona donde se asienta el poblado en un espacio de dominio público, lo que significará la expulsión y expropiación que obligará a los vecinos a abandonar sus hogares. La directora territorial de Presidencia en Castelló, Eva Redondo, que ha escuchado las demandas de los afectados, ha reiterado el apoyo total de la Generalitat Valenciana a los vecinos y vecinas y al ayuntamiento de Cabanes, tal y como ya hizo el presidente, Ximo Puig, en su visita al poblado.
Los vecinos de Torre la Sal, frente de la sede de la Dirección Provincial de Costas, han leído un manifiesto en el que han detallado sus reivindicaciones al Gobierno de España y a la Dirección de Costas: “En primer lugar , que cese la continuación del expediente de recuperación posesoria del poblado marítimo de Torre la Sal. Segunda: que se declare la caducidad de los expedientes de deslindes basados en las supuestas órdenes ministeriales del 28/10/1975 y 25/05/93, que en realidad nunca llegaron a concluirse. Tercero: que por simple economía de medios no es necesario realizar nuevos deslindes para solucionar la actual situación, ya que el simple reconocimiento de su caducidad supone reemplazar la línea de costa a su situación previa, sin afección a las viviendas de Torre la Sal y a coste cero. Y, finalmente, que se desista de las continuas insinuaciones a las que se hace referencia sobre la no existencia de concesiones a las propiedades del poblado“.
En este sentido, la directora territorial ha explicado al portavoz de la asociación de vecinos, Juan José Agost, que, aunque el gobierno autonómico no puede personarse en el expediente abierto por Costas porque no es parte afectada, desde la Dirección General de Urbanismo se está estudiando iniciar la vía legal para defender los actos administrativos aprobados por la Generalitat, es decir, el Plan General de Ordenación Urbana de Cabanes de 1983, “ya que este plan, que contó con los informes favorables de todas las administraciones, declaraba suelo edificable Torre La Sal, lo que ha conllevado una serie de actuaciones urbanísticas durante cerca de 40 años que generan una serie de derechos a las casas”.